En la provincia de Zhejiang, al este de China, se erige un verdadero coloso del comercio global: el Puerto de Ningbo-Zhoushan, el primero en la historia en superar los 1.000 millones de toneladas de carga anuales. Con dos terminales de contenedores capaces de manejar más de 10 millones de TEU cada una, mantiene desde hace 16 años consecutivos el título de puerto más activo del planeta.
Este liderazgo no solo se explica por su infraestructura monumental, sino también por una estrategia de modernización integral. El puerto ha impulsado de forma sostenida la construcción de instalaciones inteligentes y ecológicas, posicionándose como referente mundial en puertos 5G, con tecnologías que optimizan cada etapa de la carga y descarga, reducen tiempos de espera y minimizan el impacto ambiental.
Con estas innovaciones, Ningbo-Zhoushan no solo mueve mercancías: mueve el futuro del comercio marítimo.
